Playa de Migjorn, Formentera: la playa más larga y tranquila de la isla

Migjorn no es una simple playa: es un universo de calma que se estira por kilómetros. Hay algo en su amplitud, en sus rincones solitarios y su mar cristalino que te hace desconectar de todo. Si buscás un lugar para desaparecer un rato del mundo, este es el lugar.

La Playa de Migjorn es, quizás, la más versátil de toda Formentera. No es una simple playa: es una franja inmensa que recorre casi toda la costa sur de la isla, con más de 5 kilómetros de arena blanca, tramos de roca, dunas y caminos de madera que serpentean entre la vegetación. Migjorn no se visita, se recorre. No se la mira de una sola vez, porque cambia con cada paso, con cada acceso y con cada hora del día.

Acá no hay una sola postal, hay decenas. En algunos sectores vas a encontrar paz total, silencio y mar en calma. En otros, pequeños hoteles, chiringuitos con música suave, zonas con hamacas y cócteles en la mano. Es esa mezcla lo que la hace única. Una playa que puede ser salvaje o cómoda, según dónde te pares. Si buscás sombra, hay pasarelas que conducen a refugios naturales bajo sabinas. Si querés sol directo y agua turquesa sin una piedra, también lo vas a encontrar.

Migjorn tiene algo que otras playas no tienen: libertad para elegir cómo la vivís. Es ideal para quienes van por un día entero, con el bolso cargado y sin apuro. Caminás, elegís un rincón, te instalás. El sonido del mar es constante, pero no molesto. Y como no es una cala cerrada, siempre corre un poquito de brisa. Perfecta para los días de calor fuerte.

Llegar es fácil, ya sea en coche, moto o bici. Hay múltiples entradas a lo largo de la carretera principal, cada una con su pequeño parking o camino de tierra. Incluso se puede acceder a pie desde varios alojamientos cercanos. Por eso, Migjorn nunca está completamente llena: la gente se reparte, encuentra su rincón, y se queda.

Y cuando cae el sol, ese horizonte infinito frente al sur se tiñe de dorado. No es el atardecer dramático de Cala Saona, pero tiene su propio encanto: más tranquilo, más íntimo. Ideal para terminar el día con una cerveza fría, los pies en la arena y la certeza de que, en Formentera, no hace falta correr para encontrar belleza.

Guía 2025: servicios en la playa de Migjorn, Formentera

¿Cómo llegar a la playa de Migjorn, Formentera?

Ferry Ibiza → La Savina

Desde Ibiza, tomás el ferry a La Savina. Hay varias compañías, el trayecto puede durar entre 25 y 60 minutos. El precio ronda los 20 € a 30 €, dependiendo de si es rápido o normal. Salen barcos cada 30-60 minutos en verano.

Coche o moto hasta Migjorn

La mejor forma de llegar a Migjorn es en coche o moto alquilado desde La Savina. El trayecto toma entre 15 y 20 minutos dependiendo del tramo que elijas, ya que Migjorn es muy extensa. Hay varios accesos señalizados desde la carretera principal.

Bus público (L2)

La línea L2 de autobús pasa cerca de la zona de Migjorn, especialmente la parte central. Sale desde La Savina o Sant Francesc. El billete cuesta 2 €, pero no tiene muchas frecuencias al día. Ideal para quienes no alquilan vehículo.

Bicicleta

Desde La Savina hasta Migjorn hay unos 10 a 12 km según el tramo. El paseo en bici puede durar entre 40 y 50 minutos. Hay caminos asfaltados y otros de tierra, así que es recomendable usar bicis con ruedas resistentes. Se alquilan desde 10 €/día.

A pie desde pueblos cercanos

Podés caminar desde Sant Ferran o Es Mal Pas hasta algunos accesos a Migjorn. Hay caminos rurales tranquilos, aunque puede llevar más de una hora y media. Es ideal para quienes buscan tranquilidad total o quieren evitar el transporte motorizado.

Preguntas frecuentes sobre Cala Saona, Formentera

Migjorn no es una simple playa: es un mundo entero en sí mismo. Kilómetros de arena clara, rincones solitarios, pasarelas de madera y una mezcla de libertad y silencio que no se encuentra en cualquier lado. Acá, cada tramo tiene su propio ritmo, y eso la vuelve única.